Se dispara la demanda de expertos en COBOL, un lenguaje de 1959 con el que empecé mi carrera junto al Basic hace ya mil años.
En Estados Unidos una buena cantidad de empresas están haciendo un llamamiento desesperado para contratar expertos en COBOL al no poder procesar las solicitudes de desempleo que lamentablemente están a la orden del día con la pandemia actual.
El Covid-19 pone de nuevo en valor este programa de hace 60 años que, a pesar de su longevidad, sigue siendo vital en instituciones y empresas financieras como los bancos y aseguradoras.
Según parece se está produciendo un colapso de los sistemas informáticos para procesar las numerosas solicitudes de desempleo en EEUU, clave para poder pagar las ayudas por quedarse en paro.
Parece ser que los programas de hace tanto tiempo no contemplaban el número de solicitudes que se están produciendo hoy en día en los campos numéricos donde se guardan las cantidades y contadores. Puede parecer un fallo de programación, pero debemos tener en cuenta que en aquellos años la memoria y el espacio en disco eran caros y los tamaños de los campos se racionaban con cuidado.
Algo parecido al famoso efecto 2000 con los años de dos dígitos que volvían a poner el año a 00. El problema es que no hay expertos para arreglar algo tan antiguo.
Cobol es uno de los abuelos en lenguajes de programación creado para gestionar procesos en backend (en septiembre de 2019 cumplió 60 años). Aun así sigue muy presente hoy en día a pesar que se dejó de impartir como materia académica hace décadas en las facultades de informática.
El 95% de los cajeros automáticos sigue funcionando gracias al COBOL y el 43% del sistema informático bancario está construido con este lenguaje.
La la edad media de los programadores de Cobol está entre 45 y 55 años. Muchos hace tiempo que nos reciclamos a otras tecnologías más modernas y es complicada la marcha atrás.
Está visto que estos programas prehistóricos hay que seguir manteniendolos o hay que cambiarlos. IBM ha optado por la primera opción ya que corre principalmente sobre sus máquinas y ha comenzado a facilitar su aprendizaje mediante la iniciativa Open Mainframe.
¿Por que sigue vivo este lenguaje hoy en día?. Pues principalmente por un tema de pasta. La migración de proyectos que se hicieron en los años 60, 70 o 80 es muy costosa y larga en el tiempo ya que normalmente no se guarda documentación y mucho menos conocimiento debido a que la gente que los desarrollaron ya no está disponible. Vista la experiencia en el efecto 2000, una migración puede durar incluso años. Por eso las empresas que siguen usándolo, se resisten a cambiar y prefieren invertir en mantenerlos que en cambiarlos.
COBOL es un lenguaje servidor orientado a los negocios y a los procesos en backend, es decir, procesos que se lanzan sin intervención del usuario para tratar grandes cantidades de datos. su sintaxis fue pensada para ser parecida a la del inglés. A diferencia de lenguajes de programación más modernos se basa en funciones y no en objetos y apenas hace uso de símbolos para simplificar la programación.
La demanda de programadores en Estados Unidos, concretamente en Ohio y Houston, es alta, hasta están ofreciendo de todo para que lleguen desarrolladores. Incluso les proporcionan vivienda.
No hay hoy en día mucha documentación para aprender COBOL, la mejor manera es a través de desarrolladores que lo dominan. No es un lenguaje difícil, está muy estructurado con secciones en las que se definen las entradas y salidas de datos separadas de la lógica. Es muy lineal, es decir, las instrucciones se ejecutan una detrás de otras y como mucho se reutiliza código a través de funciones.
IBM ha puesto a disposición de los que quieran aprender Cobol un manual (PDF) que se ha publicado en el marco del proyecto Open Mainframe para comprobarlo. Eso sí, requieren una comprensión avanzada del inglés técnico.
Así que ya sabes, si quieres renovarte y encontrar trabajo en EEUU regresa al pasado, que parece que es el futuro.