Según la wikipedia, el internet de las cosas (Internet of Things ó IoT) es un concepto que se refiere a una interconexión digital de objetos cotidianos con Internet. Es, en definitiva, la conexión de Internet más con objetos que con personas.
Muchas veces se mezcla el IoT con la inteligencia artificial. Una cosa es dotar de inteligencia a los objetos y la otra es que se comuniquen entre ellos. Aunque en la actualidad, el objetivo es que los objetos hagan ambas acciones a la vez, que interaccionen, reconozcan ciertas señales y den una respuesta ante un estímulo.
Este nuevo campo tecnológico trae consigo una buena cantidad de oportunidades de negocio, además del cambio en nuestro día a día al que tendremos que acostumbrarnos queramos o no. Veamos las oportunidades que trae el Internet de las Cosas (IoT);
Incremento de la productividad: Los procesos de producción se pueden llevar a cabo de forma más eficiente, con unas gafas inteligentes, un empleado, en lugar de tener que consultar un manual de instrucciones de un dispositivo puede tener la información buscada de un vistazo.
Fidelización: Ajustando las estrategias de servicio para cumplir con las crecientes expectativas de los clientes. Ayuda a reforzar la conexión entre servicio, mantenimiento y reparación en post-venta, incrementando también así significativamente la fidelización del cliente. Poniendo un ejemplo, un producto cualquiera puede comunicarse directamente con el fabricante si detecta un error y ayudar a este a arreglarlo preventivamente llamando al usuario para que realice el mantenimiento. Esto está ya muy avanzado en temas de automoción, pero pronto lo veremos en cualquier dispositivo de nuestro hogar, frigorífico, televisión, lavadora, …
Diferenciarse de la competencia: Conocer en tiempo real que pasa con cada producto puede hacernos actuar con inmediatez ante los cambios en el mercado. Realizar cambios en el producto en base a como los usuarios lo utilizan o desarrollando una campaña de marketing diferente. Por ejemplo, una plataforma que combine documentación de servicio y sensores en tiempo real puede utilizarse para crear experiencias de realidad virtual que proporcionen a los técnicos de servicio instrucciones adecuadas a cada caso particular.
Soporte de ventas: Los argumentos de venta para un determinado producto pueden ser demostrados más eficazmente con datos de rendimiento en tiempo real. Esos datos permiten además desarrollar nuevas ideas publicitarias para productos concretos.
Personalizar la comunicación con el cliente: Con la información recibida es posible dirigir ofertas personalizadas a los clientes, ya se trate de elegir el momento adecuado o crear una oferta más específica. El éxito de las compañías en el futuro dependerá de cómo las empresas y los sectores manejen la información recogida por dispositivos IoT. Así las decisiones estratégicas que tome cada empresa estarán respaldadas por datos reales y actualizados. La integración con tecnología BI en este caso es muy importante.
¿Como lo aplico?
En principio, una empresa o particular que quiera iniciarse en esta tecnología necesitaría unos chips o sensores instalados en distintos dispositivos de un entorno cerrado ( la oficina, el taller, la fábrica, el almacén o un hogar) que se comunican entre sí a través de redes 3G y 4G.
Con el uso del 5G, los dispositivos gastarán menos batería y la conexión será más eficaz pudiendo ser utilizadas estas soluciones en entornos al aire libre.
Es necesario también tener en cuenta el desarrollo de ciertas habilidades nuevas en la empresa para asegurar que la implementación de Internet de las Cosas sea efectiva y beneficiosa.
Cooperación entre departamentos: La cooperación interdepartamental permite agrupar las capacidades necesarias para alcanzar el objetivo común. La relación entre marketing, IT, atención al cliente y comercial se verá reforzada.
Competencia de datos: Para poder evaluar en tiempo real los datos proporcionados por el Internet de las Cosas, se necesita hardware para conectar aparatos de medición ubicados en diferentes lugares y recursos de proceso y almacenamiento que están en la nube. Además nuevos perfiles profesionales, como es el caso de los científicos de datos.
Seguridad: En las empresas que utilizan dispositivos IoT aumentan las posibilidades de acceso a sus propias redes, a la vez que existen ciertas deficiencias de seguridad en los dispositivos IoT. Los fabricantes de los dispositivos acostumbran a utilizar la misma clave para el acceso a través de Internet para facilitar las cosas al administrador, y esto abre las puertas a potenciales ataques de los hackers.
Socios: La Industria 4.0 y la IoT requieren conocimientos que no tienen todas las empresas. En vista de esto es interesante asociarse con partners que estén dispuestos a efectuar una transferencia de conocimientos.
Clientes y usuarios: El entusiasmo por la innovación tiene que estar equilibrado con la incertidumbre que puede crear el hecho de si los clientes van a aceptarla rápidamente. Por esta razón, es una buena medida involucrar a usuarios y clientes desde el primer momento.
Con la búsqueda actual por los producto eficientes los sectores productivos del país están en una acelerada fase de transformación digital donde IoT es un habilitador clave para lograr eficiencia y evolución.
Seguramente en los próximos dos años algunos sectores se transformarán radicalmente gracias al Internet de las cosas. Por ejemplo las fábricas y entornos industriales están evolucionando hacia entornos flexibles y dinámicos, en los que desaparecen los cables. Además, en su interior, todos los elementos estarán conectados y compartiendo datos en tiempo real.
Las tiendas a pie de calle, con dispositivos de reconocimiento ( beacons ) podrán detectar el perfil de usuario que está en una tienda para mejorar su experiencia como cliente, se analizará el flujo de visitantes para entender qué y en qué momento compran y así ajustar precios y productos.
En lo referente al sector público, este ha sido uno de los pioneros en utilizar soluciones de Internet de las cosas gracias a proyectos «smart city» con los que consiguen controlar la iluminación de las farolas, el estado de los contenedores o la gestión del riego.
El sanitario es uno de los espacios en los que los dispositivos IoT tienen mayor futuro. Pulseras o relojes que detectan la presión sanguínea y predicen ataques epilépticos o miden el ritmo cardíaco durante el ejercicio son solo el inicio de lo que está por llegar a nivel personal para el control de nuestra salud, pero si vamos a clínicas y hospitales las aplicaciones son inmensas.
No todo van a ser buenas noticias, al igual que tener todo conectado nos proporciona un gran avance tecnológico y muchos beneficios, también abre las puertas al crimen. Esta tecnología presenta un riesgo inherente a todo el entorno digital: la ciberseguridad. A mayor conectividad, más brechas de información y espacio para que los hackers se cuelen en el sistema. Este es el punto donde hay que incidir, es importantísimo generar seguridad en los usuarios si queremos que esta tecnología avance. Es por otro lado también un nicho de mercado lleno de oportunidades de negocio para nuevas start-up.
IoT es tierra desconocida, está todo por hacer, todo por conectar. La tecnología IoT, vinculada al ‘big data’, supone una poderosa herramienta de marketing para el fabricante que le permite recabar información muy valiosa de su cliente y de su producto.
Actualmente podemos ver ingeniosas aplicaciones de colonos en este mundo.
Colchones inteligentes que miden el tiempo y calidad del sueño y aportan datos al fabricante para su desarrollo y calidad.
Otro ejemplo son los museos de Ciencias Naturales de Madrid, el de Arte Romano de Mérida o en la Casa de Cervantes donde los visitantes pueden descargarse la aplicación ‘Bemuseums’ para disfrutar de una nueva experiencia. A través de tecnologías de proximidad, los ‘beacons’ y el GPS, la ‘app’ detecta el perfil de público y ofrece una visita personalizada por el museo.
A través de una plataforma de IoT que se conecta con las ‘app’ móviles que los usuarios han instalado en sus smartphones, informan al visitante (museo, hotel, centro de negocios, sala de exposiciones o arte, etc…) y le ofrecen servicios personalizados según su perfil.
Después, los responsables de los negocios analizan los datos de comportamiento de sus visitantes para saber cómo se mueven, qué cosas les interesan más o menos y cómo mejorar esos recorridos.
Mandar olores a través de una red social como Twitter es también posible con la tecnología IoT. Esto abre todo un mundo de posibilidades en el ámbito empresarial.
La aplicación al control de estructuras como la monitorización de la construcción nuevas vías de metro, el control de la estabilidad de un puente y la vigilancia de la presión del agua en una presa puede hacerse instalado sensores que midan diferentes aspectos de estas estructuras.
Otra aplicación de esta tecnología ayuda a los ayuntamientos de tamaño medio a reducir los costes operativos en la recogida de basuras utilizando un dispositivo instalado en los contenedores que informa sobre su nivel de llenado y genera alarmas de incendio o volcado a los responsables.
Como podéis ver es todo un mundo nuevo esperando que seamos creativos, que exploremos, innovemos y evolucionemos.