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Coches autónomos, inteligentes y educados

Hace poco he visto este vídeo en el que un vehículo autónomo intenta incorporarse a una autovía desde el carril de aceleración con muy poco éxito.

El pobre coche pone el intermitente «pensando» que los otros coche reducirán la marcha para acomodar su incorporación al carril, de forma que se haga de forma segura y todos mantengan el ritmo.

Lo que no «entiende» el pobre es que a los mandos de los otros coches hay humanos que no tienen el mismo «sentimiento» de colaboración y que si ven un intermitente en alguien que se va a meter delante en vez de ceder el paso aceleran para impedirlo. Cosas de humanos.

En este caso el GPS le indica que se incorpore a la autovía y el software de conducción autónoma que hay obstáculos que se lo impiden. Como nadie le deja suficiente sitio para la incorporación, determina que es peligroso y opta por salir por un desvío que no quería coger o quedarse parado si no tiene otra salida. Así puede estar el pobre dando vueltas y más vueltas sin llegar nunca a destino.

El software que gestiona las decisiones del coche ha sido «enseñado» en base al cumplimiento estricto de las normas de circulación y a la seguridad de sus ocupantes, por eso está en desventaja.

¿Que pasaría si el software estuviera diseñado para aprender de los hábitos del conductor cuando toma los mandos o de las decisiones de los otros conductores?. Seguramente lo mismo que cuando una persona empieza a conducir. Empieza en la autoescuela y aprende ha hacer todo lo correcto para pasar el examen, una vez aprueba y empieza a adquirir soltura y experiencia todo cambia ¿o no?.

Para que la circulación autónoma funcione hay dos soluciones, o humanizamos a los vehículos inculcándoles la ley del mas fuerte o todos los coches deben ser autónomos y regirse por los mismos principios de circulación. Entiendo que la solución es la segunda, también se podría pensar en dotar de inteligencia a los humanos y que respetemos las reglas y a los demás, pero eso se me antoja bastante más complicado.

También está el poder del dinero dando vueltas por ahí. He escuchado, y espero que sea broma, que se está pensando en comercializar la preferencia en base a el valor del coche que se conduce o a plugins de software que se podrán comprar/descargar para darnos prioridad sobre los vehículos que no pagan o pagan menos. En fin, hacemos coches que respeten las normas para que todo sea más seguro y respetuoso y nos lo cargamos vendiendo el alma del vehículo al diablo.

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